El polisulfuro cálcico es un tratamiento foliar efectivo para combatir plagas y enfermedades en los cultivos. Su combinación de calcio y azufre proporciona una acción fungicida y bactericida, ayudando a proteger las plantas y mejorar su salud general. Ideal para fortalecer las defensas naturales de los cultivos y mantener un entorno agrícola saludable y productivo.