La leonardita es un mineral orgánico valioso que mejora la calidad del suelo y optimiza el crecimiento de los cultivos. Su alta concentración de ácidos húmicos y fúlvicos enriquece el suelo, favorece la retención de nutrientes y agua, y promueve una mayor fertilidad. Ideal para mejorar la estructura del suelo y potenciar el rendimiento agrícola de manera sostenible.